El Leche y Habas cayó con orgullo ante uno de los equipos de la parte alta. El resultado: 1-7, pero los nuestros demostraron pundonor, sacrificio, y llegaron al área rival como pocas veces en los últimos tiempos. Se resistía el gol, pero al final Sergio, el pichichi de esta temporada, anotó sobre la bocina un merecidísimo gol del honor. En mi opinión el resultado fue algo exagerado, pero hay que saber meterla. Faltaron a la cita Jairo, Manolo Montes y Amador, que se borró del partido por un duelo de pádel. A él se lo perdonamos todo porque es el capitán, pero hay que dar ejemplo...
La anécdota llegó con el debut oficial como jugador de campo de Curiel. Tras ser fichado como portero ocasional, Dami le cedió caballerosamente su puesto y, lo que es más importante, su camiseta y pantalón para que pudiera jugar. Guti entonces ocupó la portería. He aquí la famosa camiseta, que pasará a los anales de la historia lechehabera:
El próximo partido, jugando con este ímpetu, muy mal se tiene que dar para que no mejoremos el resultado de este encuentro.
Aúpa Leche y Habas siempre
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